martes, 30 de noviembre de 2021

Ángela Merkel deja un legado excepcional

Pag 7, Anf,EL Periódico, Contacto,Los Tiempos,Correo del sur,El Día,SudamericaHoy,Mundiario,La Patria,EJU, Ángela Merkel fue cuatro veces elegida Canciller y, tras 16 años en el poder, ahora lo deja por decisión propia. Cuesta creer su desprendimiento, ya que el poder tiene un imán del que los políticos no se quieren desprender. Doctora en física cuántica, fue la primera mujer elegida para ejercer el cargo de Canciller de Alemania desde su creación como Estado federal en 1870. Ha sido reelegida tantas veces que hay una generación que sólo ha conocido un canciller. Durante sus varias gestiones, fue la líder más pragmática y sólida en sus actuaciones ante la heterogénea Unión Europea. Su juventud estuvo marcada por vivir en Alemania oriental, encerrada tras alambres de púas. Aquello le dio otra visión del mundo: la de uno libre, democrático y empático. Gran parte de su éxito se lo debe a su sencillez, austeridad, sagacidad, intuición, sin dejar de ser firme en la toma de decisiones. Durante sus gestiones, tuvo que enfrentar varias crisis, entre ellas, la caída del sistema financiero mundial del 2008; las amenazas de la desintegración de la Unión Europea; la gigantesca migración del 2015; y la pandemia mundial de la COVID-19. Ha sido una de las líderes más influyentes en su país y el mundo. No fue gratuito que el 2018, el Forbes la nombrara como la mujer más poderosa del mundo. Su gestión tuvo luces que sombras. Sus opositores la criticaron por haber sido “duditativa” en la toma de muchas decisiones. Otros la critican por haber dado discursos flojos. Sus opositores acuñaron el término Merkiavelli en sentido que a pesar de sus dudas, al final lograba sus objetivos. A mi juicio, una errada interpretación de “El Príncipe” Maquiavelo. Ha tomado decisiones drásticas en favor del medioambiente. A raíz del accidente nuclear en Fukushima, decidió eliminar 17 plantas nucleares y reemplazarlas por energía renovable, principalmente la solar y la eólica. En la crisis migratoria, que fue la más grande desde la Segunda Guerra -ya que llegaron a Europa más de un millón de inmigrantes a raíz la guerra en Siria así como por los conflictos en Irak y Afganistán-, Alemania abrió sus puertas y fue el país europeo que más gente recibió. “Podemos hacerlo” fue su frase emblemática probablemente para dar otra imagen de su nación tras la primera y segunda guerra y su pasado nazi. Al respecto afirmó que Alemania recibió ayuda de otros países tras la Gran Guerra y pidió a sus conciudadanos recibir a los refugiados. A raíz de esta decisión, fue muy criticada por gente de su propio partido (el conservador Unión Demócrata Cristiana), la oposición y principalmente por la extrema derecha xenofóbica. No a todos los alemanes y europeos les cayó bien que abra las puertas a los inmigrantes. No así a la prensa norteamericana. El Time la eligió “La persona del año” por su manejo de la crisis de los refugiados, así como la deuda de Grecia, el terrorismo y por mantener a la UE unida. Fue una llamada de atención a presidentes como Trump, que ha puesto trabas a los inmigrantes. Fue la cuarta mujer en figurar en la portada de la revista como personaje del año. El Time, antes la nombró como una de las 100 personas más influyentes. En su manejo de la pandemia de la COVID-19, tomó acciones inmediatas. Dijo: “Es serio. Tómenlo en serio”. Luego expresó que sería el mayor desafío de Alemania desde la Segunda Guerra. Probablemente lo sea para su país y el mundo. Angela Merkel se va por la puerta grande dejando un legado excepcional tras ser una líder extraordinaria en su país y el mundo.

viernes, 12 de noviembre de 2021

Una boliviana fue la primera aviadora en Sudamérica

ANF,EJU,PAG 7,EL DIA,LOS TIEMPOS,DIARIO CONTACTO, SUDAMERICAHOY,MUNDIARIO,CORREO DEL SUR,LA PATRIA, EL PERIODICO. Se trata de una persona extraordinaria: la Coronela Amalia Villa de la Tapia. Fue una mujer vanguardista, porque rompió con todas las convenciones a principios del siglo pasado ya que decidió ser piloto de aviación. Fue la primera aviadora en Bolivia y Sudamérica. Como en Bolivia no existía una escuela de aviación, se fue a vivir a Lima. Allí estudió para ser maestra de colegio. Luego trabajó enseñando y con sus ahorros financió las clases de pilotaje en la Escuela de Aviación Civil de Bellavista de Perú. Y en 1922 obtuvo su licencia de pilotaje tras una prueba en un avión Curtis JN-4 Jenny. Ella comentó en aquella oportunidad: “¿Fue mi destino o mi decisión? No tenía miedo al motor, ni a la altura, ni a la muerte. Ya había practicado demostraciones y acrobacias aéreas, pero una poderosa emoción me tomaba entera”. Fue una pionera de la aviación cuando en Bolivia no había aviones, escuela de aviación y menos aeropuertos. En la década de los años treinta, fue a Francia y obtuvo su segunda licencia como piloto en la Escuela de Aviación Caudron de Crotoy ubicaca cerca de París. Con todas sus credenciales y amplia experiencia como aviadora, se ofreció ser piloto durante la Guerra del Chaco. Su petición, sin embargo, fue rechazada por ser mujer. Su vida fue dedicada a la aviación. No se casó ni tuvo hijos. Escribió tres tomos sobre la historia de la aviación de Bolivia titulado “Alas de Bolivia”. Fue la primera mujer que ingresó al ejército boliviano; fundó la primera escuela militar de aviación en nuestro país; y fue la primera coronela de la aviación boliviana, grado que le otorgó el entonces general de aviación y ex presidente de Bolivia, René Barrientos. Recuerdan que en los actos oficiales siempre usaba su uniforme militar. Gracias a su influencia y una campaña que realizó en todo el país, logró que el Estado adquiera los primeros dos aviones. Si alguien merece un reconocimiento en grande es ella. En días pasados la Cámara de Senadores de la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia, le otorgó el reconocimiento más alto que da el senado llamado “Símbolos Patrios”. Aquello fue por haber realizado servicios meritorios eminentes en Bolivia y en el ámbito internacional. También se le otorgó una medalla con su nombre estampado en ella, que gracias a la iniciativa de mi colega escritora Gaby Vallejo, tuve el honor de recibir en su representación. Este notable reconocimiento después de 27 años de su fallecimiento, fue gracias a las gestiones de Daly Santamaría, senadora por Potosí de Comunidad Ciudadana y su equipo de apoyo, entre ellas Mónica Chacón. Gaby Vallejo proporcionó información y fotografías. Y, su novela histórica “Desde el espejo del tiempo” -que narra la vida de la piloto-, coadyuvó para que se le otorgue tan importante reconocimiento. Incluso existe un destacamento aéreo denominado “Coronel Amalia Villa de la Tapia” ubicado en Uyuni en el departamento de Potosí. Gracias a las investigaciones y de Amalia Villa de la Tapia, sobre la aviación boliviana, se cuenta con el acervo histórico de la Fuerza Aérea Boliviana convertido hoy en el Museo Aeroespacial de la FAB. Dichos reconocimientos realizados por el senado serán depositados próximamente en dicho repositorio junto a otros objetos personales de la piloto. Sus restos descansan en el cementerio de Cochabamba.